domingo, 17 de diciembre de 2017

De SALIR DE UN HOPPER







        Restaurante en Nueva York
        Hace un instante era Christina. Hace un instante, el desamparo.

        Mírala, entra, algo varía. De repente se tiene, se incorpora, se erige, es la heroína de un escenario hostil. Todos caníbales; ella, una cebra.

        Mírala, no le importa la humillación de lava del amante: hace unas horas él estaba boca abajo, desnudo y narcisista, como en otro cuadro de Hopper. Y, ella, sentada en el borde de la cama; luego ha sabido huir del territorio adverso.


        Mírala divisando una mesa vacía y anidable, decidiendo, acaso sonriendo, decidiendo: también comeré carne.

Andrew Wyeth - “El mundo de Christina” (1948. MOMA, Nueva York)

sábado, 2 de diciembre de 2017

De COLORICANCIONES



      Resultado de imagen de corales y peces

      CORAL

      Cualquier rojo, estando vivo, sabe esperar.

      Vienen los peces que se llaman ángel llama,
      ángel francés tan presumido,
      ángel medianoche,
      ángel emperador buscando trono
      y un caballo de mar por si hay antojo
      para trotar por prados sumergidos.

      También hay peces ballesta, ¡qué despistados,
       han perdido las flechas!

      Y se acercan
       los peces cirujano con su bata azul
       porque juegan a  médicos.

      Un escorpión de espinas peligrosas,
      damiselas dominó
      que ganan la partida,
      los peces mariposa de amapolas marinas
      y algún payaso pez que prefiere nadar      
      como un payaso.

      El rojo, estando vivo, palacio de las algas
      invisibles.
      El vivo, el habitado rojo con cimientos
      de espuma.

      Una ciudad de rojo suavizado.

      Entran y salen los peces por las ventanas
      curioseando.